Boxeador profesional que se coronó como campeón en tres categorías de peso diferente, lo que lo convirtió en el primer latinoamericano en alcanzar dicha hazaña. Es el púgil más joven en la historia del boxeo profesional en obtener un título mundial. Participó en la primera pelea entre dos puertorriqueños por una corona mundial. Se destacó en el cuadrilátero por sus destrezas defensivas y por su fuerte pegada.
Wilfredo Benítez nació el 12 de septiembre de 1958 en el barrio del Bronx en la ciudad de Nueva York. Es el menor entre siete hijos. Su madre Clara Rosa era enfermera de profesión y Gregorio “Goyo” Benítez, entrenador de boxeo. Su familia regresó a Puerto Rico a mediados de la década de 1960 y se establecieron en el sector Saint Just del municipio de Carolina, donde su padre estableció un gimnasio de boxeo. Aquí don Goyo entrenaba a varios boxeadores, incluidos a sus hijos Gregory, Frankie y Wilfredo, quien apenas contaba con siete años.
Durante la adolescencia, ya boxeaba aficionadamente. Luego de 154 peleas aficionadas, a los 15 años, dio el salto al boxeo profesional, con su padre como entrenador y manejador. El 22 de noviembre de 1973 se llevó a cabo su primer enfrentamiento profesional contra el puertorriqueño Hiram Santiago, a quien noqueó en el primer asalto. En los años siguientes, amasó varias victorias.
El 6 de marzo de 1976, Wilfredo Benítez aspiró al cetro mundial de la Asociación Mundial de Boxeo (WBA, por sus siglas en inglés) para el peso súperligero, también llamado Wélter Junior o Wélter ligero, es decir, boxeadores profesionales que pesan entre 135 y 140 libras (61.237 a 63.503 kilos). En el Estadio Hiram Bithorn de San Juan, derrotó al campeón de dicha categoría, el colombiano Antonio “Kid Pambelé” Cervantes, por decisión dividida. Con esta victoria se convirtió en el boxeador más joven en la historia boxística en ganar un campeonato mundial.
Tras defender el campeonato en tres ocasiones, Benítez optó por subir de categoría a la de peso Wélter, que incluye a aquellos boxeadores profesionales que pesan entre 140 y 147 libras (63.503 kilos y 66.678 kilos). Amasó tres victorias en este peso antes de enfrentarse al campeón del Consejo Mundial de Boxeo (WBC, por sus siglas en inglés), el mexicano Carlos Palomino el 14 de enero de 1979 en el Coliseo Hiram Bithorn de San Juan. Benítez venció a Palomino por decisión dividida, obteniendo así un segundo título mundial.
Defendió el cinturón una vez contra Harold Weston y, luego, se enfrentó a Sugar Ray Leonard, el campeón del peso Wélter de la Federación Norteamericana de Boxeo (NABF, por sus siglas en inglés). En esta excitante contienda celebrada el 30 de noviembre de 1979 en el Ceasar’s Palace en Las Vegas, Nevada, Wilfredo Benítez fue noqueado en una ocasión en el tercer asalto y sufrió una cortadura en el sexto. Perdió el campeonato por decisión técnica, luego de que el árbitro detuviera la pelea cuando apenas faltaban seis segundos para finalizar el decimoquinto y último asalto.
Tras esta derrota, Wilfredo optó por subir de categoría al peso Súperwelter, mediano junior o mediano ligero –boxeadores profesionales entre las 147 y 154 libras (66,678 a 69,853 kilos). Alcanzó el tercer cetro mundial al derrotar al boxeador antiguano Maurice Hope, a quien derrotó por decisión unánime. Esto lo convirtió en el púgil más joven en obtener tres títulos mundiales en tres categorías diferentes.
La primera defensa del título Súperwelter la hace frente al también puertorriqueño Carlos Santos el 14 de noviembre de 1981 en Las Vegas, Nevada. Fue la primera ocasión en la historia que dos puertorriqueños se enfrentaron en el cuadrilátero para obtener un título mundial. Benítez venció a Santos por decisión unánime. Defendió el cinturón contra el púgil panameño Roberto “Mano de Piedra” Durán, a quien derrotó por decisión unánime. Luego, se enfrentó al estadounidense Thomas Hearns el 3 de diciembre de 1982 en Nueva Orleans, quien se destacaba por ser un pegador agresivo. Benítez perdió el título Súperwelter por decisión mayoritaria.
Al año siguiente, realizó dos peleas, una contra el estadounidense Tony Cerda, que ganó por decisión unánime y otra contra el sirio Mustafa Hamsho, que perdió por decisión unánime. Tras esta derrota, su carrera boxística fue decayendo paulatinamente. Continuó boxeando en los próximos años, hasta que en 1986, con miras a obtener una buena bolsa, se trasladó a Argentina para enfrentar a Carlos María del Valle Herrera, a pesar de que ya no se encontraba muy bien de salud. Tras perder la pelea por nocaut técnico en el séptimo asalto, permaneció por poco más de un año en este país alegando que los promotores le debían dinero. Regresó a la Isla en enero de 1988 mostrándose deteriorado de salud.
Durante esta época, fue diagnosticado con encefalopatía postraumática, una condición degenerativa del cerebro causada por trauma cerebral, es decir, a causa de los golpes que recibió boxeando. A pesar de su condición, Wilfredo Benítez intentó retornar al cuadrilátero en 1990, pero, se vio obligado a retirarse ese mismo año debido a la disminución de sus reflejos y al deterioro físico y mental.
A lo largo de su carrera en el boxeo profesional, Wilfredo Benítez obtuvo un total de 53 victorias (31 por nocaut), ocho derrotas (cuatro por nocaut) y un empate. Se destacó por ser un boxeador ortodoxo, es decir, que demostró buena técnica en el cuadrilátero, tanto en defensiva como en ofensiva. Sus destrezas defensivas, particularmente la capacidad de eludir golpes, le ganaron el mote de “El Radar”.
Wilfredo Benítez fue exaltado al Salón de la Fama del Boxeo Mundial en 1993 y al del Boxeo Internacional en 1996. En la actualidad, vive en un centro de cuidado.
Referencias:
Fonseca Barahona, Marvin. Puerto Rico, cuna de campeones: 56 años de pura adrenalina, 1934-1990. Puerto Rico: s.n., 2008. Impreso.
“Wilfred Benítez”. BoxRec.com. BoxRec Boxing Encyclopaedia. Web. 8 abril 2010.
“Wilfred Benítez”. La Red Biográfica de Puerto Rico. Dr. Cirilo Toro Vargas, 30 junio 1999. Web. 8 abril 2010.

12 de septiembre de 1958
Bronx, New York
Publicado: 8 de septiembre de 2014.