La hacienda Labadie o Irurena fue tanto una prominente hacienda cafetalera durante el siglo XIX, como una central azucarera a principios del XX. Ubicada en Moca, municipio al oeste de Puerto Rico, parte de sus 1,300 cuerdas de terreno se extendían también a los municipios de Isabela, por el este, y Aguadilla, por el oeste.
La hacienda pertenecía a tres hermanos de la familia Pellot, provenientes de la región vasca Fuenterrabía, cerca de la frontera franco-española. Para ese entonces la hacienda era cafetalera y se conocía como Irurena, que significa en vasco “de tres hermanos”. En 1860, Juan Labadie adquiere la hacienda de los Pellot. Después de la muerte de Labadie, su viuda, Cornelia Pellot, opta por demoler la casa de madera y construir una de hormigón.
La casa Labadie fue diseñada por el ingeniero francés Paul Servajean en 1893, sin embargo, no se construyó hasta el 1905. Su diseño arquitectónico, Barroco del Segundo Imperio, es una adaptación caribeña del chateau o palacio francés, estilo muy de moda para ese entonces en Europa. Los materiales y el estilo de construcción son prueba del periodo de transición de la construcción en mampostería a hormigón armado, por lo que sus paredes presentan un grosor mayor al que técnicamente era necesario.
El edificio de dos pisos tiene una planta en forma de “L”, que está levantada sobre un podio con óculos que permiten la ventilación de la estructura. El diseño de la fachada es simétrico, con una elegante escalera en la entrada, un balcón corrido en ambos pisos y pabellones en los extremos, los cuales están techados con cúpulas de cebolla en metal que dan plasticidad al techo. Las columnas del balcón son de orden jónico y los balaustres son de hierro forjado. Las puertas principales, en ambos balcones, están adornadas con molduras y detalles inspirados en la naturaleza. Las puertas del segundo piso están enmarcadas con complejas molduras adornadas con paneles rectangulares y diseños de la flor de lis (símbolo de la nobleza). Luego de la llegada de los estadounidenses a Puerto Rico, la hacienda Labadie pasó a ser colonia cañera de la Central Coloso.
La Hacienda Labadie está inmortalizada en la literatura puertorriqueña como la hacienda Palmeras, residencia de la familia Moreau en la novela La llamarada (1935) de Enrique Laguerre, escritor puertorriqueño oriundo de Moca. Los Moreau están basados en los habitantes reales de la hacienda durante la época en que fue escrita la novela.
En 1993 un fuego destruyó la estructura, quedando sólo las fachadas en pie. Ese mismo año, el municipio de Moca adquiere la hacienda. Luego de restaurar las estructuras, la hacienda abre sus puertas en 1999, con el nombre de Palacete Los Moreau, en honor a los personajes de la novela de Laguerre.
Adaptado por Grupo Editorial EPR
Fuente original: Catálogo de Propiedades, Registro Nacional de Lugares Históricos, Oficina Estatal de Conservación Histórica, Oficina del Gobernador, 1995.
Autor: Grupo Editorial EPRL
Publicado: 30 de diciembre de 2009