Retrato de Felipe Gutiérrez y Espinosa por el artista José Alicea
Músico, Compositor, Educador, Director de orquesta
Al maestro Gutiérrez, como le llamaban sus discípulos, se le distingue como el músico y compositor puertorriqueño más sobresaliente en el siglo XIX.
Nació el 26 de mayo de 1825, en San Juan. Sus estudios en música comenzaron en plena niñez, con su padre Julián, quien era músico de larga trayectoria, llegado a Puerto Rico en 1815 como miembro del Regimiento de Infantería de Granada.
A los veinte años Gutiérrez y Espinosa era un músico conocedor, que aparentemente superaba en talento a su maestro. En 1853 fue nombrado Músico Mayor de la banda del Regimiento de Iberia, de donde era músico de segunda clase su padre.
En 1858, cuando contaba con treinta y tres años, fue nombrado al cargo de Maestro de Capilla de la Catedral de San Juan, siendo el primer y único puertorriqueño en esa posición. Allí le daba clases a los miembros del coro y dirigía su orquesta. Ejerció esa labor hasta mediados de 1898, cuando fue separado del puesto, luego de la invasión estadounidense el 25 de julio de ese año.
Paralelo a su misión educadora, su trabajo como compositor abarcó la creación de más de 300 obras. Las mismas se dividen en música religiosa, cuyo ejemplo más conocido es “Misa en do mayor”; sinfónica, que incluye varias oberturas para distintos tipos de orquesta como “La familia” y “La manganilla”, entre otras; y varias obras para teatro lírico.
La música religiosa ocupa el espacio principal del trabajo de este músico. En este renglón logró traducir al lenguaje de los sonidos todo tipo de sentimientos, como por ejemplo, según el también músico Braulio Dueño Colón, “las crueles vicisitudes de su vida; la amargura de ver cómo iban desapareciendo sus hermanas, una a una, minadas por la tisis…” También alcanza innovaciones interesantes como la incorporación por primera vez en Puerto Rico del uso del saxofón en su obra “Totta Pulchra”.
En la música para teatro, hay que destacar muy especialmente que Gutiérrez y Espinosa fue el primer compositor puertorriqueño en escribir una ópera en Puerto Rico. Se trata de una pieza en tres actos, que se llamó “Guarionex” (c. 1856), y se basó en la obra de teatro “La palma del cacique” de Alejandro Tapia y Rivera. Esa obra lo convirtió en el primer músico en el Caribe en crear teatro lírico. La obra alusiva al cacique Guarionex se representó en el teatro municipal de San Juan, con la participación del bajo Francisco Oller y Cestero, más conocido por su obra pictórica. “Macías” (c. 1870), es otra ópera suya, también en tres actos, basada en libreto de Martín Travieso. “El bearnés” es la tercera ópera que se le conoce a este autor. La misma está basada en una obra de Antonio Biaggi. Mientras que “El amor de un pescador”, es una zarzuela suya, en dos actos.
El maestro Gutiérrez dirigió orquestas, orfeones y fundó una academia de música en donde enseñaba teoría, solfeo, canto, varios instrumentos de cuerda y diversos instrumentos de viento; sin costo alguno. Fue miembro fundador del Ateneo Puertorriqueño, inaugurado en 1876. Allí también compartió sus conocimientos con discípulos y promovió la celebración de veladas musicales para el enriquecimiento de la ciudadanía en general. Murió el 28 de noviembre de 1899.
Referencias:
Batista, Gustavo. “Felipe Gutiérrez y Espinosa (1825-1899): y el ambiente musical en el San Juan de su época. San Juan: Edición del autor, 2005.
Dueño Colón, Braulio. “Capítulo VIII, Felipe Gutiérrez y Espinosa”, en Fernando Callejo, Música y músicos puertorriqueños, original de 1915. San Juan: Editorial Coquí, 1971.
Real Academia de la Historia. “Felipe Guiérrez Espinosa”. http://dbe.rah.es/biografias/70802/felipe-gutierrez-espinosa. Consultado 27 de abril de 2021.

26 de mayo de 1825
San Juan, Puerto Rico
28 de noviembre de 1899
Autora: Dra. Lizette Cabrera Salcedo, 27 de abril de 2021