Profesor, hispanista y escritor. Fue fundador del Departamento de Estudios Hispánicos de la Universidad de Puerto Rico y Director del Seminario de Estudios Hispánicos, hoy Seminario Federico de Onís.
Nació en Salamanca, España, el 20 de diciembre de 1885. Estudió en el Instituto de Salamanca, en el Colegio Mayor de San Bartolomé de la Universidad de Salamanca, de donde se licenció en Artes en 1905. Trabajó como bibliotecario en el Cuerpo de Archiveros de la Biblioteca de Oviedos y tres años más tarde terminó un doctorado en Filosofía y Letras de la Universidad de Madrid.
Para 1909, laboraba como auxiliar interno en la Universidad de Oviedo. Dicho año publicó su primera obra El dialecto leonés (1909), la cual ganó el premio del certamen abierto de la Real Academia Española. Pasó de auxiliar a catedrático en la misma universidad donde también dictó el discurso “El problema histórico de la universidad española”. Poco después, apareció su segunda publicación, Vida de Torres Villarroel (1912). Formó parte del Centro de Estudios Históricos durante dos años (1914-1916), periodo en el cual publicó De los nombres de Cristo de Fray Luis de León (1914) y Disciplina y Rebeldía (1915).
Federico de Onís fue un gran precursor de los estudios humanísticos en América, labor que inició en 1916 en la Universidad de Columbia, Nueva York, al fundar los Estudios de Letras Hispánicas en dicho centro docente. Permaneció vinculado a este centro hasta su retiro en 1954. Ese mismo año, publicó Fueros Leoneses (1916). En 1920, aceptó la dirección del Instituto Hispánico en EE.UU. y publicó El español en los Estados Unidos (1920); éste último fue el discurso inaugural de nuevo año académico de la Universidad de Salamanca (1920-1921).
Llegó a Puerto Rico en 1926 para incorporarse al Departamento de Español de la Universidad de Puerto Rico, invitado por el canciller de dicha institución, el estadounidense Thomas E. Benner, quien se había dado a la tarea de modernizar la estructura administrativa de la Universidad y el currículo, así como de mejorar los estudios hispánicos. Desde 1925, la profesora estadounidense Josephine W. Holt, directora de la escuela de verano de la institución, comenzó a invitar profesores visitantes españoles de gran prestigio para que se incorporaran a la facultad. Entre los que llegaron figuran: Tomás Navarro Tomás, Angel de Río, José Robles Pazos (catedrático en la Universidad de John Hopkins), así como Federico de Onís. Con las recomendaciones de estos académicos, particularmente de Navarro Tomás y De Onís, se desarrollaron cursos subgraduados y graduados para lo que sería el Departamento de Estudios Hispánicos.
El rector Benner aprobó la creación del Departamento de Estudios Hispánicos en 1927 y fue Federico de Onís su primer director. El departamento quedó adscrito a la Facultad de Artes y Ciencias hasta el 1942, que con la reforma universitaria pasó a formar parte de la Facultad de Humanidades.
Durante su dirección, De Onís fundó y dirigió la Revista de Estudios Hispánicos (1928) la cual obtuvo el aval de la Universidad de Puerto Rico, la Sociedad Cultural Española, la Universidad de Columbia Nueva York y el Centro de Estudios Históricos de Madrid. En 1931, regresó a su cátedra en Nueva York.
A principios de la década de 1930 presentó una serie de publicaciones: Canciones españolas (1931), Ensayosobre el sentido de la cultura española (1932) y Antología de la poesía española e hispanoamericana (1932). En 1934, asumió la dirección de la Revista Hispánica Moderna en Nueva York. En 1937, De Onís se hizo ciudadano estadounidense.
De 1942 a 1947, trabajó como profesor invitado en la Universidad de Texas y en 1949, en la de Denver. Ese mismo año visitó varios países: Venezuela, Guatemala, Costa Rica, Panamá, Colombia, Ecuador, Cuba, Perú, Chile, Uruguay y Argentina, en los que dictó conferencias sobre hispanismo. En 1953, se retiró de la Universidad de Columbia y recibió la Cruz de la Fundación Internacional Eloy Alfaro.
El presidente de la Universidad de Puerto Rico, Jaime Benítez, lo invitó a que nuevamente dirigiera el departamento que ayudó a fundar años atrás. De Onís aceptó y se estableció en Puerto Rico por tres años (1954-1957). Publicó España en América (1955), una colección de ensayos producto de su investigación por Hispanoamérica.
En 1957, aceptó otra invitación, esta vez para dirigir el Instituto de Estudios Hispánicos de la Universidad Central de las Villas en Cuba (1957-1958). Regresó a Puerto Rico como profesor del Departamento de Estudios Hispánicos, periodo en que fundó y dirigió el Seminario de Estudios Hispánicos. De Onís donó su biblioteca personal al seminario, el cual lleva su nombre en la actualidad.
Entre sus publicaciones se encuentran: Disciplina y Rebeldía (1915); El español en los Estados Unidos (1920); Jacinto Benavente, obra de teatro(1923); Martín Fierro y la poesía tradicional (1924); Ensayos sobre el sentido de la cultura española (1932); España en América (1955) y Antologie de la poésie ibéroaméricane (1956).
Falleció en Hato Rey el 14 de octubre de 1966.
Referencias
Revista La Torre. 33.127-130. (1985). Impreso.
Hernández Aquino, Luís. ¨Federico de Onís se fue de la vida¨. Boletín de la Academia de Artes y Ciencias de Puerto Rico. 3.2 (1967): 355-361. Impreso.
Rivera de Alvarez, Josefina. Diccionario de literatura puertorriqueña. 2a ed. Vol 2. San Juan, P. R.: Instituto de Cultura Puertorriqueña, 1974. Impreso.

20 de diciembre de 1885
Salamanca, España
14 de octubre de 1966
Hato Rey
Publicado: 26 de agosto de 2010.