Primero de mayo de 2017 en Puerto Rico, Foto Noticel. https://www.noticel.com/gobierno/ahora/la-calle/20180430/un-vistazo-a-lo-que-paso-el-1-de-mayo-de-2017
La conmemoración del Primero de Mayo está relacionada en sus orígenes con la época histórica en que el capitalismo comenzó a convertirse el sistema socioeconómico predominante en Inglaterra, en el último tercio del siglo XVIII. Dicho punto de partida está entrelazado, a su vez, con la revolución tecnológica industrial y la utilización de las máquinas en el proceso de producción. En el capitalismo las clases sociales básicas están constituidas por los patronos empresarios, banqueros y comerciantes empleadores, de un lado, y los trabajadores asalariados, de otro lado. Las relaciones entre ambos se sintetizan en los términos de quiénes poseen el capital y quiénes ejecutan el trabajo por un salario.
Fue en Inglaterra en donde, después de abolir el feudalismo y la relación nobles y siervos, de 1760 en adelante la mayoría de los trabajadores se convirtieron en obreros asalariados. El proceso de transición hacia el capitalismo, que se remonta a la llamada Edad Media feudal en Europa, igualmente se efectuó en Flandes (Bélgica), los Países Bajos (Holanda) y zonas industriales de Francia, Italia, Alemania, España y otros países. En cada lugar el proceso fue diferente, aunque en algunos casos los caminos de algunos se interconectaron.
Como sinónimo de trabajadores asalariados, también se emplea los términos de clase obrera y de proletariado. El proletariado fue el segmento de trabajadores más bajo en la Roma antigua, definido por ser una clase social desposeída, productora de “prole” o hijos, y empleados por los propietarios y el estado en diversas tareas. A comienzos del siglo XIX se reintrodujo el término con aplicación a la clase obrera.
La jornada laboral oscilaba entre 16 y 10 horas, en unos países y otros. Según fue avanzando el siglo XIX, frecuentemente los trabajadores reclamaron mejores condiciones y la reducción del número de horas de trabajo. El empresario industrial Robert Owen (1771-1859), oriundo del País de Gales en Gran Bretaña, se sensibilizó ante el cuadro existencial deplorable de los trabajadores y las trabajadoras, y estableció unas industrias modelo en Escocia. Proveyó vivienda adecuada, centros de educación y cuido de los niños y niñas, y redujo la jornada laboral. Owen acuñó la famosa frase de las Tres Ocho: 8 horas de trabajo, 8 horas de recreación y 8 horas de descanso. La jornada de ocho horas de trabajo fue planteada como la norma y por ello lucharon los trabajadores en diversos países.
Lo que dio inicio a la conmemoración del Primero de Mayo fue la lucha dada por la clase obrera en la ciudad de Chicago, una de gran desarrollo industrial, en Estados Unidos. La clase obrera de Chicago en la década de 1880 constaba de miles de familias inmigrantes de Europa, entre las que se destacaban entonces las alemanas. Obreros organizados promovieron huelgas y manifestaciones, en Chicago y otras ciudades, exigiendo las ocho horas de trabajo entre los días 1ro y 4 de mayo de 1886. El último día, en la plaza Haymarket de aquella ciudad misteriosamente estalló una bomba que causó la muerte a cuatro obreros y siete policías y alrededor de 200 obreros fueron heridos. Las autoridades del Gobierno y de la Policía acusaron sin pruebas a varios líderes obreros y los encausaron criminalmente. August Spies, Albert Parsons, Adolf Fischer y George Engel fueron ejecutados en la horca. Oscar W. Neeb, Samuel Fielden y Michael Schwab recibieron condenas de cárcel, conmutadas en 1893; y el joven de 22 años Louis Lingg se suicidó en la cárcel, con el grito de “Viva la anarquía”.
Durante el siglo XIX, como resistencia y en oposición al sistema capitalista surgieron las corrientes políticas del socialismo, comunismo y anarquismo. Todas tuvieron diversos postulados y matices conceptuales. Hubo socialistas reformistas y revolucionarios, por ejemplo. Contrario a la definición oficial de la anarquía como caos y desorden, los anarquistas postulaban la abolición del estado como ente de poder y autoridad y la realización de la autogestión democrática e igualitaria de los trabajadores desde todas las instancias de la economía. En eso coincidieron con los socialistas y los comunistas, que se diferenciaban de los anarquistas en que creían necesario un período de transición del capitalismo al socialismo con un estado en manos obreras.
En 1864 se fundó la Asociación Internacional de los Trabajadores (AIT), con sede en Londres. Su dirigente principal allí fue Karl Marx, coautor con Friedrich Engels del “Manifiesto comunista” (1848) y autor de “El capital” (1867). La AIT organizó diversas secciones en Europa y Estados Unidos. Reunió trabajadores y trabajadoras de diversas tendencias, republicanos, socialistas, comunistas y anarquistas, que promovían la solidaridad entre los obreros y países, y procuraban llevar cabo una lucha de los trabajadores coordinada a nivel internacional. Hubo, sin embargo, choques y conflictos entre tendencias, especialmente entre comunistas y anarquistas encabezados por Mikhail Bakunin. La Primera Internacional, como se le conoció históricamente, se disolvió en 1876.
No obstante, los principios de solidaridad se mantuvieron entre los trabajadores y en un congreso obrero en Bruselas en 1889 se constituyó la Segunda Internacional, activa hasta 1918. La Federación Americana del Trabajo (AFL, por sus siglas en inglés) promovió una manifestación de recordación de los “Mártires de Chicago” y la Segunda Internacional obrera designó en 1890 el 1ro de Mayo como Día Internacional de los Trabajadores, luego se señaló el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Desde entonces se conmemora el Primero de Mayo como el día de lucha combativa de los trabajadores y las trabajadoras de todo el mundo por sus derechos, la justicia social y por un futuro socialista.
Puerto Rico, como todos los países en unos momentos y otros, también fue interconectado al proceso histórico de establecimiento del sistema capitalista de producción. Las formas de sociedad en el contexto colonial bajo la dominación de España incluyen varias etapas específicas en el País, con sus modalidades laborales y actividades económicas principales: (I) Encomienda y esclavitud de los indios, y economía minería del oro, 1508-1541; (II) Importación masiva de africanos esclavizados, y economía azucarera mercantil, 1542-1659; (III) Esclavitud negra y servidumbre de los campesinos agregados, y economía ganadera y maderera, 1660-1779; (IV) Esclavitud, servidumbre y trabajo asalariado coaccionado (régimen de la libreta de jornaleros) bajo la economía de la hacienda agrocomercial (azúcar, café, tabaco), 1780-1873. En ese tiempo se combinaron todas esas formas de trabajo, hasta que en 1873, se abolió el régimen de la esclavitud. Después de ese año el trabajo asalariado, mal remunerado, caracterizará la fuerza laboral de las primeras centrales azucareras, de 1873 a 1898, y posteriormente
Orígenes del movimiento obrero y el 1ero de mayo en Puerto Rico
Luego de la abolición de la esclavitud y del régimen jornalero coaccionado, Puerto Rico entró plenamente en el terreno socioeconómico del capital y el trabajo asalariado, de 1873 en adelante y hasta el presente.
En el último cuarto del siglo XIX, surgieron las primeras formas de organización obrera: sociedades de socorro mutuo, cooperativas y casinos recreativos y culturales. Asimismo, los trabajadores y las trabajadoras llevaron a cabo protestas y huelgas por mejores condiciones laborales, contra impuestos abusivos a los comestibles básicos y mercancías en general, y por la jornada razonable y racional del trabajo.
En Puerto Rico, la conmemoración del 1ro de Mayo fue promovida por un grupo de artesanos que procuraban fundar un sindicato obrero y un periódico que representara los intereses de su clase, en San Juan en 1896. En una reunión clave, al parecer en febrero de 1897, José Ferrer y Ferrer, y Ramón Romero Rosa (tipógrafos), Eduardo Conde (encuadernador y pintor), Eusebio Félix Santiago y Fernando Gómez Acosta (carpinteros), Norberto Quiñones (tonelero), José Rivera (de oficio desconocido) decidieron iniciar la publicación del periódico “Ensayo Obrero”, precisamente el 1ro de mayo de 1897. A ellos se unió el joven español inmigrante, que había estado antes en Cuba y fue perseguido por sus autoridades coloniales, Santiago Iglesias Pantín, también carpintero.
Con “Ensayo Obrero” comenzaron las conmemoraciones del Día Internacional los Trabajadores en nuestra nación. En 1897, Puerto Rico estaba sometido al largo despotismo colonial y militar español, y no eran permitidas las manifestaciones obreras. Al año siguiente, tampoco fue posible debido a la Guerra Hispanoamericana y la invasión y ocupación de Puerto Rico por parte de Estados Unidos, a partir del 25 de julio de 1898.
Sin embargo, bajo el gobierno militar estadounidense, en compleja situación política y laboral, los obreros organizaron la Federación Regional de Trabajadores (FRT) y llevaron a cabo la primera manifestación masiva del 1ro de Mayo de 1899. Con el tesón de trabajadores y trabajadoras militantes fue que se inició la centenaria tradición de marchas y manifestaciones por justicia social. Por ejemplo, la foto muestra la marcha de aquel primero de mayo entrando por la calle San Francisco, en el viejo San Juan, para llegar hasta La Fortaleza, residencia de los gobernadores.

Manifestación del Primero de Mayo en 1899, en la calle San Francisco. Foto tomada de periódico “The Evening Star” (Washington, D.C.), publicada el 17 mayo de 1901, p. 16.
En aquella época, como ya en Estados Unidos se comenzaba a implantar el límite de ocho horas en la jornada laboral, y al calor de una huelga de obreros azucareros en 1899, el general Guy V. Henry aprobó dicha jornada en Puerto Rico como reportó el periódico la “Gaceta de Puerto Rico” el 2 de mayo de 1899. El 17 de mayo del mismo año terminaba el mandato de Henry en la Isla. Tanto en nuestro País como en Estados Unidos, debido a la oposición y maniobras de la clase empresarial, la implantación general de las ocho horas de trabajo se postergó hasta el fin de la Gran Depresión y crisis del capitalismo de 1929-1933. Ello requirió mucha más lucha obrera. También fue un camino de dificultades y diferencias sindicales y políticas, que persisten hasta el presente. Hoy, no obstante, el Primero de Mayo se conmemora y sigue marcando un instante muy importante de lucha y reivindicaciones y convergencia de los trabajadores y las trabajadoras en todo el mundo, y en Puerto Rico.
Referencias:
Campos, Ricardo. “La celebración del 1ero de mayo en Puerto Rico”. Edición de Francisco Moscoso. https://issuu.com/coleccionpuertorriquena/docs/campos_primero_de_mayo_edici_n_fco_moscoso. Consultado 30 de abril de 2021.
Meléndez Badilo, Jorell A. “Orígenes del primero de mayo en Puerto Rico” https://www.academia.edu/8011718/_Or%C3%ADgenes_del_Primero_de_Mayo_en_Puerto_Rico_. Consultado 30 de abril de 2021.
____________________. “Voces libertarias: orígenes del anarquismo en Puerto Rico”. San Juan: Colectivo Autónomo C.C.C, 2013.
Moscoso, Francisco. “La Federación Libre, las Turbas y los Mártires Obreros, 1899-1902”. Claridad, En Rojo, 2 al 8 de mayo de 2019.
_________________. “La clase obrera de Puerto Rico ante el 1ero de mayo de 1897”. Claridad, especial para En Rojo, 27 de abril de 2021.
Autor: Francisco Moscoso, 30 de abril de 2021
Revisión: Lizette Cabrera Salcedo, 30 de abril de 2021